Hace más de un año, el profesor Muhammad Yunus, Nobel de la Paz 2006, fue removido de su cargo de director general del banco de microcréditos que él mismo fundó en 1983, el Grameen Bank.
Se le acusaba de un supuesto caso de evasión fiscal, hecho que fue desmentido tras la investigación realizada.
A continuación se argumento que por su edad , 70 años, no podía seguir en el cargo y el Banco Central de Bangladesh le destituyó.
En realidad fue atacado por el gobierno de la primera ministra Sheikh Hasina por haber intentado crear un partido político.
El otorgamiento de microcréditos, su revolucionaria idea, permite a millones de personas salir de la pobreza. El banco Grameen presta servicios a más de 8,3 millones de prestatarios, el 97% mujeres.
Las mujeres forman la gran mayoría de los prestatarios del Banco Grameen: ellas son propietarias del patrimonio del banco y son representadas por 9 de los 13 puestos en la Junta Directiva.
Ahora el modelo del Grameen Bank está en peligro: el gobierno quiere tomar control del Banco Grameen y quitarle el poder a las mujeres prestatarias y propietarias.
Se ha lanzado una campaña internacional solicitando firmas para apoyar a las mujeres del Grameen Bank para que mantengan sus derechos.
Entre los apoyos, diecisiete senadoras de los Estados Unidos han enviado una carta a la Primera Ministra Sheikh Hasina, instando al gobierno a apoyar plenamente la integridad del Banco Grameen y su compromiso con los prestatarios. Expresan su preocupación por el daño que pueda sufrir esta institución modelo con un cambio que vaya a perjudicar a las mujeres pobres.
Acceso a la Campaña de apoyo a las mujeres del Grameen Bank (hasta el 17 de agosto)