En general, el otorgamiento de un microcrédito sin aval, o crédito social, va siempre ligado a la presentación de un plan de empresa, donde el emprendedor presenta su idea y la viabilidad de su proyecto.
Se pueden encontrar en la web muchos modelos para elaborar un plan de empresa, pero normalmente el micro-emprendedor suele acudir a una institución (municipal, autonómica, ONG, ..) donde se ofrece asesoramiento de forma gratuita.
Estas instituciones de apoyo a emprendedores desempeñan un papel clave en el éxito de los proyectos microempresariales.
Al desarrollar el plan, lo único que buscan la mayoría de los emprendedores es poder acceder a la financiación y este planteamiento es erróneo. El primer objetivo de un plan debe ser el de conocer si una idea es viable o no. La financiación será el paso siguiente.
El apoyo dado por las organizaciones al emprendedor no debe limitarse pues a elaborar un plan de empresa exclusivamente con el fin de obtener un crédito. El apoyo debe ser mucho más amplio y el objetivo a conseguir debe ser el éxito de la empresa.
El acompañamiento debe iniciarse desde el análisis de la idea. Se debe comprobar la capacidad del emprendedor para ejercer la actividad dada y también darle un mínimo de información y de educación empresarial si se considera necesario:
- una información práctica sobre
- tipo de negocio presentado
- requisitos administrativos
- una formación básica
- empresarial: contabilidad básica, técnicas de ventas, merchandising…
- financiera: productos más habituales, términos más comunes, ..
- Internet: búsqueda de información, ..
Algunos centros de apoyo empresarial cuentan con modelos de simulación de puesta en marcha de empresas muy interesantes.
Un tutor personal debe acompañar pues a los emprendedores desde el principio para:
- dirigir la confección del plan de empresa (no hacerlo) con los datos más exactos posibles: inversión necesaria, gastos fijos, gastos variables, estudio de la competencia, análisis DAFO,…
- asesorar durante la puesta en marcha del negocio (cuando siempre surgen dificultades: contratos abusivos, problemas con las licencias administrativos, retrasos en las entregas, ..)
- controlar de cerca la actividad durante los primeros meses (desviaciones producidas, rectificaciones )
El emprendedor es el que toma las decisiones sobre su negocio, pero formación e información son imprescindibles para que sus decisiones sean las más acertadas.